jueves, 5 de mayo de 2022

Desperdiciando lo bueno

 Sentir, es una sensación tan extraña a veces, sabes que existe, pero solo vos podés percibirla, es una cadena invisible que nos encierra en una prisión de la que no podemos escapar.
Los sentimientos nos atrapan, los confundimos, los llevamos a lugares que no deberían estar, no al menos para encontrar la paz en uno mismo.

Sentir amor quizás sea común, pero puede que no sea verdadero amor, obsesionarse es más fácil de lo que uno puede creer, pero lo fácil es desperdiciar amor en lo que no saben valorarlo.
Algunos han dado tanto por personas que en verdad no las vieron, no vieron a ese verdadero yo, al verdadero ser, ese que merece brillar por sobre todo, ese que está entero siempre.

Que fácil es apagarse, es sencillo que quien no te vea en verdad te apague, que deje cada uno de tus sueños muertos en un rincón mientras tu vida pasa sin más, olvidando quien fuiste un día.
El mundo termina siendo frío desperdiciando lo bueno que está en vos, dejando parte de tu brillo en dónde no debería estar, porque sabés todo lo que hay dentro tuyo, ese merece luz.

Pero esa esperanza no va a morir, esa de que vendrá algo mejor, de que todo tendrá un nuevo color. 
Tus sentimientos son tu tesoro, tu corazón va a saber quien los merece, cuando sientas esa paz, ese va a ser el camino correcto.
Aunque muchas veces damos demasiado a quienes no lo merecen, todo eso bueno que está en nosotros un día traerá finalmente la luz.