La oscuridad del terror

Ser joven y enfrentarse el mundo siempre es revolucionario,

es antinatural ser joven y no enfrentarse a las cosas que pasan,

sea para bien o para mal, siempre la lucha está, 

siempre se busca un lugar,algunos lo encuentran siendo parte y otros luchando contra la corriente.

Fueron almas que se plantaron ante la injusticia, solo proyectando,
solo haciendo lo más humano que puede hacerse, no mirar al costado.
Porque el mundo tan cruel en su inmensidad nos lleva a ser individuales,
y comernos unos a otros como bestias sedientas de sangre.

Quizás por eso los monstruos se ensañaron tanto con ellos,
se volvieron contra las almas que buscaban justicia y libertad.
Y no era suficiente llevárselas, había que desaparecerlas,
hacer que su lucha e historia nunca hubiera existido.

Las atraparon entre torturas y oscuridad, arrebatándoles todo,
pero lo más importante a destruir era su esperanza, el creer que no había futuro.
Aunque tantos se perdieron entre tierra y mar, otros salieron y no se callaron,
contaron la historia que esos hubieran querido sepultar para siempre.

Y hoy tanto tiempo después, están los que quieren matar esa historia,
hacer desaparecer la lucha de quienes soñaron algo mejor,
volviendo héroes a los demonios, volviendo justa la desaparición y robo de vidas,
vidas jóvenes y las que estaban por nacer, mostrando justa cada tortura.

Es su historia la que debemos defender a capa y espada, la que no hay que dejar morir,
hacer presente cada relato de terror, porque si el olvido gana también ganan esos monstruos.
Que llama del sacrificio de esos que dieron su vida por un grito de libertad,
siga siendo un camino hacia dónde ir en contra de toda injusticia.