Ahí quiero estar

Todo el tiempo rondando ese viejo pensamiento de dolor encima,
el miedo con el que el mundo nos contagia nos roba la seguridad.
¿Que sentido tiene pelear contra este mundo que no nos da paz?
¿Para soñar con un mañana si no sabemos si llegarémos a ese futuro?

Tal vez no todo esté perdido, tal vez si haya una esperanza en el mañana,
quizás podamos pensar, luchar, esperar por un horizonte más brillante.
Aunque el dolor nos tire para atrás y nada de lo que veamos nos haga bien,
al final del camino siempre volverémos a encontrarle un sentido a todo.

En el final cuando todo se vea borroso, ahí volverémos a ver la luz,
una que creímos olvidar y que hace mucho no sentíamos.
Para cambiar todo se debe empezar de a poco y desde cero,
mostrando que lo pequeño revoluciona los mundos más grandes.

Y si hay un mejor mañana en tus sueños, ahí quiero estar,
dónde seamos nosotros al fin y olvidemos todo el mal que nos rodea.
Solo desearía que, cuando ese mañana llegue, los días vuelvan a estar iluminados,
iluminados con el brillo de tu sonrisa, esa que sera el nuevo sol.