Fue un instante, o al menos eso creí,
¿Fue un segundo o una eternidad?
Sigo preguntándome eso,
ese último momento que encontré tus ojos.
El extraño momento en que el tiempo se detuvo,
quisiera entender el porqué,
puede que lo sepa, pero puede que no quiera verlo,
el sentir a veces puede ser tan incierto.
Nuestras miradas no necesitaban traducción,
estaba ahí, no sé que fue pero ahí estuvo.
Pero aunque no vuelva a ver tu mirada,
vuelvo a ese recuerdo y encuentro sosiego.
Quizás termines caminando solo entre muchos recuerdos,
esos que alimentan algunas alegrías en mi interior.
No estoy seguro de demasiado en mi vida,
pero sé que tu sonrisa siempre alimentará mis sueños.
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